Yo mismo lo he estado jugando y la realidad es que me está divirtiendo bastante. En un momento en el que los juegos han de ser obras maestras o terribles fracasos, se agradece parar a disfrutar de algo que se encuadra en el punto medio, con fortalezas y debilidades.
Sin embargo, hay una de las características clave del juego que no han acabado de encajarme; y esa no es otra que el mundo abierto. Aunque Atomic Heart no es un mundo abierto durante toda la aventura, sí que hay zonas abiertas que conectan puntos importantes de la misma. Tanto es así que incluso es posible usar coches para desplazarnos.
En estos emplazamientos más abiertos podemos conseguir recursos, entrar en laboratorios secretos con jugosas mejoras de arma ocultas y combatir contra feroces robots... Pero también se puede seguir el camino principal y ni siquiera ver estos asuntos opcionales.
El mundo abierto no es constante

Este hecho no tiene porqué molestarme particularmente, no le pido a Atomic Heart que revolucione los mundos abiertos. Limpiar campamentos opcionales y conseguir loot no es algo que tenga que estar mal, y mucho menos con ese guante parlanchín y su forma tan divertida de desvalijar cada cajón que nos encontramos. Sin embargo, sí que hay cosas que no acabo de disfrutar.
Durante las fases en zonas cerradas tenemos una especie de agujeros que lanzan drones de combate y reparación. En la parte superior nos indican con unas luces la cantidad de drones de las que disponen, pudiendo funcionar como unas oleadas si nos detectan los robots o incluso las cámaras, ya que incluso pueden volver a levantar a otras máquinas que ya hayamos destruido.
El problema está fuera de los muros de las instalaciones. En estas zonas abiertas están presentes estos drones de combate y de reparación, pero de una forma infinita. Aparecen ahora a través de unas estructuras similares a unos contenedores de vidrio repletas de agujeros, y acuden incluso tras destruir de forma sigilosa una cámara.
Este sistema es el ejemplo de tener un sistema fallido y buscar solucionarlo con parches. El sistema del que hablo es el hackeo de las cámaras para abrir puertas de laboratorios opcionales de forma remota. Como usamos las mismas cámaras, han de poder repararse de forma continua para que no nos bloqueen el al contenido opcional en el caso de ser rotas por nuestras armas.
Sigo sin entender del todo cómo funciona

Además de ser poco intuitivo y explicarse de una forma mejorable, está el tema de que sí que podemos desactivar todo el sistema de seguridad, aunque de forma temporal. Esto se hace hackeando una caseta, en la cual podemos usar un microrobot para hacer que baje el halcón, el dron maestro de seguridad que sobrevuela la zona. Ni siquiera que esta mecánica sea parte de una misión principal ayuda. Es engorroso y después de 15 horas creo que aún no entiendo bien el timing de este sistema.
Aunque la mayoría del tiempo no te quedarás en una misma zona, y simplemente limpiarás un grupo de robots para llevarte los recursos que estén por ahí, a poco que quieras conseguir esas mejoras adicionales para tus armas sufrirás a los robots de reparación infinitos. Ese "contenedor de vidrio" será el responsable de que vuelvan a la vida ciertos enemigos, reventando tus reservas de curaciones y de munición.
He llegado al punto en el que paso de largo, o simplemente salgo corriendo tras robar los recursos necesarios para seguir con mi partida. Los robots reparadores infinitos limitan la exploración y hacen que una parte que debería aportar diversidad a Atomic Heart, termine por ser un suplicio.
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