"Se ha añadido mucha tecnología desde los tiempos del DK1 y DK2" justifica Palmer Luckey.
Todavía no hay nada oficial, pero Palmer Luckey, creador de Oculus Rift, ha confirmado que el casco va a costar más de 350 dólares. Lo ha comentado en el medio americano RoadToVR, en el que el empresario ha dicho que "la razón principal del precio es que se ha sumado mucha tecnología al dispositivo más allá de la que exisitía en los tiempos del DK1 y DK2 (los primeros cascos)". Luckey ha sido muy claro al respecto: "Sería una mierda" si el primer lanzamiento al consumidor de Oculus Rift se quedase únicamente en algo "decente". Lo que baraja la empresa es que puede ser una decisión negativa al principio, pero positiva a largo plazo.
Ha querido tranquilizar a los futuros s: "No se trata de 'oh, si vendemos más, hacemos más dinero', es solo una realidad que te lleva a tomar decisiones cuando estás creando algo. ¿Vas a optimizarlo al más absoluto bajo precio aunque la experiencia sea de calidad más baja? La otra opción es decir 'mira, es la primera salida de un casco de realidad virtual y vamos a hacerlo bien para la gente. Necesitamos llegar al terreno de juego y decir que tenemos la mejor experiencia posible que hemos podido hacer sin comprometer la calidad'. Debemos bajar los costes al máximo para otorgar dicha experiencia, pero debemos conseguir algo que todo el mundo quiera usar".
Luckey y compañía tampoco quieren que el olvide que la presente tecnología, a pesar de todo, sigue siendo de nicho, es decir, que será complicado hacer rentable su venta durante los primeros tiempos. La buena noticia, a pesar del precio, es que el americano confía plenamente en las capacidades técnicas y de calidad de su producto una vez llegue al mercado en una fecha aún por determinar: "Lo que sé es que la gente va a ser feliz con el precio a pesar de todo, ya que creo que estamos ante el mejor casco de realidad virtual que se puede comprar en la actualidad".