Que el avance de la tecnología nos afecta en todos los aspectos de la vida no es algo que nos pille por sorpresa. Que gran parte de lo que rodea a la Generación Z y los Milenials esté a las puertas de producir un gran cambio en cómo la tecnología evoluciona, sí podría pillar a algunos desprevenidos. Los modelos impuestos por el C-Suite de las empresas es el mejor ejemplo de ello.
Para Milenials, los cambios que se vienen entre los CEO y directores que dan forma al C-Suite de las compañías van en consonancia con su forma de ver el mundo, dejando atrás puestos como el de transformación digital o diversidad, en favor de otros más enfocados al análisis de datos o la inteligencia artificial.
La evolución de los líderes tecnológicos según Generación Z y Milenials
Según un estudio realizado por la firma West Monroe entre 1.000 directores, vicepresidentes y demás cargos de presidencia de entre 25 y 45 años, la nueva generación de líderes cree que 2025 dejará atrás a los CTO y CDO (los actuales jefes de transformación, diversidad y cambio digital), en favor de roles más específicos.
No es que la Generación Z y los Milenials se hayan olvidado de la transformación digital o la diversidad, simplemente ven esos aspectos como algo que no necesita tutelaje específico por dos razones. La primera de ellas es que ambos aspectos deben estar integrados ya en el ADN de todas las empresas a todos los niveles. La segunda, que los planes a largo plazo ya no tienen cabida.
La agilidad e inmediatez que representan sus redes sociales y consumo de contenido se traduce aquí en líderes que sean más rápidos y abiertos a la experimentación para promover no sólo la productividad, sino también la necesidad de pivotar hacia otros objetivos cuando las cosas no vengan de cara. Los resultados en semanas, en vez de en meses o incluso años, son su principal objetivo.
Para alcanzarlos, ven en la inteligencia artificial y el análisis de datos los puestos del C-Suite que deben convertirse en prioritarios. Jefes que sepan aprovechar y explotar las posibilidades que la IA pone ante las empresas en materia de productividad y eficiencia, y que también sean capaces de informatizar toda esa información que, en forma de datos y resultados, puedan convertirse en el timón de las empresas.
Aunque resulta más fácil decirlo que hacerlo, esa inmediatez escalable a todos los niveles puede terminar siendo crucial para la innovación tecnológica, pero la falta de paciencia la hora de analizar resultados puede terminar dejando en la cuneta avances tecnológicos que, precisamente como en el caso de la IA, requieran de algo más de temple hasta alcanzar el cénit que prometen.
Imagen | Mistermcknight en Midjourney
Ver 5 comentarios